Día 39

Escrito el 23/03/2024
Renee


Victoria en Cristo

En los tiempos de David, hubo hambre durante tres años consecutivos. Da­vid consultó al Señor, y el Señor le respondió: “Esto se debe a Saúl y a esa casa sanguinaria, porque él dio muerte a los gabaonitas”.

2 Samuel 21:1

 

El primer día de la semana, al amanecer, las mujeres fueron al sepulcro con los perfumes que habían preparado. Ellas encontraron removida la piedra del sepulcro y entraron, pero no hallaron el cuerpo del Señor Jesús.

Lucas 24:1-3

 

Sean sobrios y estén siempre alerta, porque su enemigo, el demonio, ronda como un león rugiente, buscando a quién devorar. Resístanlo firmes en la fe, sabiendo que sus hermanos dispersos por el mundo padecen los mis­mos sufrimientos que ustedes. El Dios de toda gracia, que nos ha llamado a su gloria eterna en Cristo, después que hayan padecido un poco, los res­tablecerá y confirmará, los hará fuertes e inconmovibles.

1 Pedro 5: 8-10

 

Oremos

Padre Santo; te doy gracias porque me has revelado esta nueva vida de Re­surrección. Como criatura resucitada, sé que no tengo que vivir con miedo a lo porvenir, ya que Tú tienes un plan específico y maravilloso para mí, por eso te ruego me des la unción para que centre toda mi atención en Ti. Quiero ser lo que Tú me has destinado a ser. Dame la capacidad de buscar cada día mas y mas de Tu sabiduría, porque solo con ella encontrare la vic­toria para cada adversidad que pueda presentárseme, como le paso a David, él tuvo que recibir la revelación de cual era la causa del hambre, a pesar que Saúl había muerto hacia varios años, se necesitaba sanear la tierra herida por el pecado. Quiero ser como David, no darme por rendido hasta que en­cuentre de Tu mano la estrategia para vencer. Resistiré firme en la fe, como me lo decís a través de la carta de Pedro, porque Tú me restablecerás y me harás cada día más fuerte e inconmovible.

Amén.